Christian Grey de » Fifty Shades of Grey «
Información del personaje
(Evitando spoilers)
Creció… en Detroit. A Christian no le gusta hablar de eso, y lo que sea que sucedió durante esa parte de su pasado todavía le provoca pesadillas. En algún momento, fue adoptado por la rica familia Gray y se mudó a Seattle con ellos.
Viviendo… en Seattle, en un magnífico ático multimillonario. Tiene un piano de cola, un helipuerto y una mazmorra. Eso, por supuesto, Christian lo había hecho a la medida. Después de todo, ¿cómo se supone que va a practicar como dominante sin una mazmorra debidamente equipada?
Profesión… empresario. Christian es el dueño de Grey Holdings Enterprises, Inc. Independientemente de lo que eso implique, le genera $ 100,000 por hora.
Intereses… tocar el piano y volar en helicóptero. Una de las razones por las que tiene el penthouse es para poder volar su helicóptero, al que apodó Charlie Tango. También es concertista de piano, habilidad que utiliza para comunicar sus sentimientos románticos a su nueva amante, Ana.
Estado civil… complicado. Christian no suele tener citas. No es que sea un mojigato, simplemente prefiere mantener sus relaciones estrictamente BDSM, llegando incluso a dar a sus sumisos contratos que estipulan su comportamiento esperado. Pero cuando conoció a Ana, supo que quería estar con ella, aunque a ella no le gustaba el BDSM y parecía tener miedo de intentarlo. Ahora que ha conocido a Ana, ¿puede equilibrar sus deseos dominantes con el deseo de estar con ella?
Desafío… su pasado y sus neurosis. Christian también podría venir con una etiqueta de advertencia que diga «Cuidado: problemas graves que podrían justificar un viaje al Dr. Phil». Su primera infancia realmente le pasó factura, y todavía está lidiando con las repercusiones emocionales como adulto.
Personalidad… confiado, agresivo y dominante. Christian está acostumbrado a tener siempre el control. Cuando era más joven, no podía controlar su temperamento, pero ahora lo mantiene bajo puño de hierro, usando BDSM para canalizar su ira de manera productiva. Pero la fuente de esa ira sigue siendo una profunda vulnerabilidad para él, y dentro del intimidante dominante hay una persona quebrantada.