Perfil y curiosidades del personaje:
(Evitando spoilers)
Creció… como un prodigio en la Academia para Señoritas Excepcionales de Miss Robichaux, una escuela para las brujas descendientes de Salem. Desde sus orígenes humildes, la resistencia y la fuerte voluntad de Fiona rápidamente le valieron el estatus de chica «it» y alumna estrella. Pero el poder es adictivo y, a medida que se convirtió en una belleza poco común, su hambre de más la llevó a tendencias desviadas.
Vivir… de regreso en Nueva Orleans, después de que la quema de una bruja de su aquelarre (un grupo de brujas) en la hoguera la obliga a enfrentar las preocupaciones que había ignorado durante mucho tiempo. Eso la alejó del glamour de Los Ángeles, donde la había llevado la búsqueda de poder, belleza y placer.
Profesión… la Bruja Suprema. Es un título que marca un poder y una autoridad que lo significa todo para ella pero que, hasta acontecimientos recientes, se ha traducido en poca o ninguna responsabilidad. Fiona preferiría vivir en el lujo y dejar el trabajo sucio a su hija, Cordelia, a quien nombró directora de la Academia. Eso había liberado a Fiona para usar sus poderes únicos para mantener su estilo de vida, a menudo al precio más alto para los demás.
Intereses… ella misma, principalmente. Está claramente motivada por su propia supervivencia y placer. Sin embargo, cuando las cosas se ponen difíciles, no puede escapar del instinto humano de proteger a su familia, incluidos sus compañeros del aquelarre.
Estado civil Soltero. De hecho, es feroz y voluntariamente independiente, pero devoradora de hombres por naturaleza. En sus palabras, “Es mi baile y lo he realizado con delicadeza y abandono con innumerables parejas. Sólo cambian las caras”. Aun así, en ocasiones, muestra debilidad por un hombre con una… desviación similar.
Desafío… restaurar el aquelarre a su antigua gloria mientras se repara la relación rota con su hija. Pero con Fiona, siempre hay otras cartas en juego.
Personalidad… perversamente inteligente con un ladrido tan malo como su mordisco, pero sorprendentemente con principios. Su estoicismo está casado con un cálculo típicamente perfecto sobre cada persona y situación que encuentra. Fiona no es alguien que se enfade (aunque, buena suerte para cogerla con la guardia baja). Ella enmascara sus verdaderos sentimientos y problemas con un ingenio inigualable y un oscuro sentido del humor. A uno de sus brujos adversarios, le escupe: «No me hagas dejarte caer una casa encima». Pero la complejidad de Fiona radica en su disgusto por el racismo, su deseo a menudo aleatorio de corregir errores y una relación de amor y odio con su hija.
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