Rust Cohle de "True Detective Season 1"

Perfil y curiosidades del personaje:

(Evitando spoilers)

Viviendo… en Luisiana, sola, en un departamento diminuto y sin adornos. No necesita colgar nada: su trabajo es su vida. Llena la habitación con suficiente humo de tantos cigarrillos que, de todos modos, no serías capaz de ver los cuadros en la pared.

Profesión… detective de policía. Pero para Rust es más que una simple profesión; lo es todo para él. Quiere justicia para las víctimas y tiene un gran agujero en el alma que sólo puede llenar con su trabajo devorador. Trabaja con su compañero Marty para abordar una serie de asesinatos, pero termina emprendiéndolos en un viaje del que tal vez no puedan escapar.

Intereses… el trabajo, los extraños caminos del universo y encontrar la paz interior. Para Rust, son todos iguales. Se entrega a su trabajo hasta un punto que es totalmente insalubre. Cuando Rust asume un caso, lo vive, incluso cuando arruina los pocos elementos de una vida social que tiene en su existencia típicamente solitaria.  

Estado civil... soltero, pero podría sentir algo por la esposa de Marty, Maggie. Aunque tiene una forma extraña de demostrarlo. Se presenta borracho a cenar en su casa y procede a contar la horrible historia de la muerte de su pequeña hija hace años.

Desafío... localizar al asesino en serie que está causando estragos en Luisiana. Y lo más importante, hacerlo sin perder la cabeza. Tiene visiones de bandadas de pájaros haciendo formas extrañas en el cielo. No puede dormir y lee libro tras libro sobre crímenes sexuales. Termina en Alaska durante ocho años, viviendo en soledad, pero no puede desconectar la parte detectivesca de su cerebro. Regresa a Luisiana para terminar la investigación, pero lo hace como un hombre muy diferente.                                                                               

Personalidad… un buscador obsesivo de significado. Su idea de una pequeña charla es: “Somos criaturas que no deberían existir por ley natural. Somos cosas que trabajamos bajo la ilusión de tener un yo, una secreción de experiencia sensorial y sentirnos programados con total seguridad de que cada uno de nosotros somos alguien, cuando en realidad, todos somos un don nadie. Es fácil ver por qué no puede mantener una amistad normal por mucho tiempo.